Las hermanas Núñez Vera como son conocidas en la mayoría de Dojos y torneos a nivel nacional empezaron su trayectoria a muy temprana edad, Leslie desde sus 7 años y Melanie con tan solo 4 años. La pasión por este deporte fue heredada por su abuelito Wilson Vera quién también fue un deportista destacado en Karate, Taekwondo y Kung-fu e inspiró esta pasión por las artes marciales a Leslie y Melanie.

Un cuadro en la pared con varias medallas alcanzadas por su abuelito fue la inspiración de Leslie y Melanie por lograr alcanzarlo y el reto de algún día superar a su mentor.

Sus padres al descubrir que el talento y pasión por el karate corre por las venas de Leslie y Melanie emprenden este hermoso viaje junto a ellas apoyándolas incondicionalmente para que conquisten su gran sueño de algún día convertirse en campeonas mundiales y ganar preseas de oro en las Olimpiadas.

Su rutina empieza a las 05:30am. Todas las mañanas su mamá las levanta a desayunar y alistarse para ir al colegio. Sus clases inician a las 7am, luego de su jornada escolar salen a las 2pm, y se dirigen a su primer entrenamiento de 3pm a 5pm con la selección de Pichincha y continúan de 6 a 7:30 su entrenamiento en el Dojo. Finalmente llegan a la casa toman una ducha, realizan sus tareas, meriendan y antes de dormir oran agradeciendo a Dios por el día concedido, con ello van a descansar para recuperar energía. Además de sus entrenamientos con la selección y en su Dojo; Leslie y Melanie entrenan en su casa con su papá quién conoce perfectamente sus movimientos y las reta cada día a mejorar su nivel y perfeccionar lo aprendido.

Su alimentación es variada y saludable, Leslie disfruta mucho de la carne, pollo y mariscos. Su plato favorito es la carne napolitana, y el fricasé de pollo, también le encanta el Sushi. Por su parte Melanie gusta más de las verduras, ama el aguacate, su plato favorito es la lasaña y el spaghetti, pero su debilidad es la pizza; ambas gustan mucho de la comida manabita principalmente platos que contengan verde, queso y salprienta. Sin embargo, los fines de semana sus papás también las complacen con algunos de sus antojos como helados y chocolates.

Los sábados en la mañana entrenan en casa con su papá, luego aprovechan para salir con sus amigos. Y los domingos es un día familiar, que por lo general les gusta ver películas juntos.

En sus competencias siempre van acompañadas de sus padres y en la mayoría de casos también de su abuelito quienes las alientan y preparan para dar lo mejor. En varios de sus torneos también forman parte de su barra tíos, abuelitas y sus amigos que luego de varias fotos las consienten con algo que a ellas les gusta.

Debido a sus viajes para participar en los torneos se ven obligadas a faltar a clases, pero esto no es un problema ya que en su colegio las apoyan y motivan, dándoles la facilidad de igualarse y reconocen su esfuerzo, ya que, a pesar de ello, Leslie y Melanie destacan con excelentes calificaciones.